martes, 29 de marzo de 2016

SIMPSON A HOMBROS EN TOROKUNA

Alfonso Simpson se alzó como triunfador de la tarde al cortar 2 orejas simbólicas tras indulto, el francés Mehdi Savalli se fue de vacío.
ANDRE PALOMINO
El día domingo se llevó acabo el mano a mano entre el francés Medhi Savalli y Alfonso Simpson, en la plaza de toros Torokuna, ante 4 toros de la ganadería San Pedro, el festejo fue organizado por la Comisión de Fiestas Patronales de Incuyo.
Medhi  Savalli, (grosella y oro); ante su primero, le colocó dos buenos pares de banderillas; destacaron pases por el lado derecho, el de San Pedro le duró poco, mata de una estocada entera tras pinchar al primer intento; con su segundo; el mejor presentado de la tarde, no le gusto desde salida, lo recibe con una larga cambiada, toro de embestida brusca y con mucho peligro, hizo pasar malos ratos a los subalternos durante el tercio de banderillas, con la muleta nada, abrevió y pasó desapercibido.
Alfonso Simpson (burdeos y oro); que se llevó el lote, con su primero estuvo variado con el capote y muleta, el toro dio una buena pelea en el caballo, pero se vino a menos; destacaron pases por el lado derecho, con su segundo, de nombre “Codicioso”, un buen toro de San Pedro, le recibe con dos faroles, el toro recibe poco castigo en el caballo (solo fue señalado), tras banderillas, se vino arriba, y Simpson estuvo variado y toreando con clase; inicia con una buena serie de rodillas en el centro de la plaza, el toro humillaba por ambos lados, destacaron naturales con mucha clase, remato toreando por bernardinas, y el público( en su mayoría) solicitó el indulto, que fue concedido por el juez de plaza, y que le valió a Alfonso Simpson adjudicarse con 2 orejas simbólicas y salir a hombros junto al ganadero don Orlando Sanchéz Paredes.  
Ficha del Festejo
Plaza de Toros Torokuna. Casi ¾ de plaza. Toros de San Pedro, 1ero y 2do manejables, nobles pero de poca fuerza, 3ero imposible, 4to indultado tras una larga faena; noble y repetidor. 
Medhi Savalli, silencio y silencio.

Alfonso Simpson, silencio tras aviso y dos orejas tras indulto